Significado y nombres de los aniversarios de boda
Siempre que tengas la oportunidad de celebrar algo con tu pareja, ¡aprovéchala! Celebrar juntos un acontecimiento importante fortalece la relación, los relaja y mantiene presentes las cosas importantes.
Festejar su aniversario de bodas nunca debe ser una tarea, sino un motivo de felicidad. Todos hemos escuchado sobre las famosas "Bodas de oro", y sabemos que se festejan a los cincuenta de matrimonio, pero no es necesario que esperes tanto para tener una celebración especial.
Se dice que en la Edad Media se les regalaba a los esposos objetos elaborados con materiales que eran cada año más sólidos, para representar cómo su relación se volvía cada vez más fuerte.
La tradición empezó en Alemania, en donde se celebraban los veinticinco años de matrimonio con una fiesta y los amigos de la pareja le obsequiaban a la esposa una corona de plata, para desearle abundancia a su hogar. Cuando cumplían cincuenta años casados, la corona que se le regalaba a la mujer era de oro. Según esta tradición, cada aniversario de casados tiene un nombre.
¿Quieres saber de qué es cada aniversario? ¡Empecemos!
Los primeros 5 años de casados
Suaves y naturales, los primeros cinco años están representados por materiales muy flexibles y fáciles de romper. Sin embargo, son elementos nobles y de gran importancia para las antiguas civilizaciones, es decir, que son la base de todo: el primer año es de papel, el segundo de algodón, el tercero de cuero, el cuarto de seda y el quinto de madera.
De los 6 a los 13 años de matrimonio
Después vienen los metales y las telas más difíciles de romper: el sexto aniversario es de hierro, el séptimo de lana, el octavo de bronce y el noveno de barro. Cuando cumplas diez años de casada debes festejar a lo grande tu aniversario de aluminio y el siguiente es el aniversario de acero. El año 12 de matrimonio es de lino y el 13 es de encaje.
De los 14 a los 20 años de matrimonio
Desde el año catorce hasta el veinte vienen materiales frágiles pero preciosos, algunos de las cuales podemos encontrar en casa de nuestros abuelitos. También vienen plantas muy bonitas y que crecen mucho: 14 años de matrimonio son bodas de marfil, 15 son de cristal, 16 de hiedra, 17 de alhelí (por cierto, las alhelíes blancas representan la fidelidad), 18 de cuarzo, 19 de madreselva, y los veinte son de porcelana.
De los 21 a los 38 años
Empezamos la segunda década con el aniversario de la fuerza: los 21 de roble. Siguen los 22 de cobre, los vitales 23 de agua, los 24 de granito... ¡y llegamos a los 25 de plata! De los 26 a los 29 tenemos rosas, azabache, ámbar y granate, y vienen los treinta de perla.
Como ves, ya llevamos muchos árboles de maderas preciosas e irrompibles, así que aprovechen para redecorar la casa en sus 31 de ébano. Del 33 al 38 están, en orden, el estaño, la amapola, el coral, el sílex, la piedra y el jade. Hay muchas piedras y flores exóticas así que hagan un viaje para verlas en sus lugares de origen.
De los 39 a los 50, las esperadas bodas de oro
Del aniversario 39 al 50 vienen las piedras preciosas, irrompibles y representantes de la riqueza. En la antigüedad, se creía que poseer algunas de estas joyas era un símbolo de buena suerte. Así que vengan los aniversarios de ágata, rubí, topacio, jaspe, ópalo, turquesa, zafiro, nácar, amatista, feldespato y circón.
Y llegamos a las ligas mayores: ¡las bodas de oro! Cincuenta añitos de casados, ni más ni menos.
A partir de los 50 años de casados
La lista no para allí, pero se acorta para celebrar cada lustro de matrimonio: el aniversario 55 es de esmeralda, el sesenta de diamante, el 56 de platino, el setenta de titanio y el 75 de brillantes.
A los ochenta años de matrimonio se cumplen las bodas de castaño, a los 85 las de mármol, a los noventa las de alabastro y los 95 las de ónix. Y, según las matemáticas, se puede llegar hasta las bodas de hueso: cien añotes de casados.
Así que ya sabes, haz que cada año sea diferente y celebra todos tus aniversarios. Para festejar cada año, regálense o compren para su hogar algún objeto que contenga el material representativo. Será un detalle bonito y les permitirá ver cómo han crecido juntos y cómo se ha incrementado su riqueza personal y hasta material, además de que preservarán una tradición antiquísima.
No es necesario que sigas al pie de la letra los nombres de los aniversarios, pero un detalle simbólico siempre es muy bien recibido y es bueno para tu relación.
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